Los de Rueda deben salir de la rutina del empate para sumar tres puntos en casa ante la selección que los humilló hace un año en Quito.
De las ocho selecciones sudamericanas que ya han completado 11 partidos clasificatorios para la Copa del Mundo 2022, la colombiana es la que menos derrotas ha encajado (dos) y, además, no ha perdido ninguna de las siete citas clasificatorias disputadas en 2021. Sin embargo, ocupa la peligrosa quinta posición que conduce a la repesca, lastrada por la excesiva cantidad de empates.
Algunas de esas tablas no pueden considerarse malos resultados, como sucede con el reciente 0-0 en casa ante una Brasil que, hasta ese momento, contaba con un pleno de victorias o con el 0-0 firmado tres días antes en Montevideo. Pero ahora necesita mejorar esa dinámica ante Ecuador, rival directo en la pelea por el Top 4.
Lo que está en juego en Barranquilla es algo más que tres puntos, pues el precedente de noviembre del años pasado desencadenó en la destitución de Carlos Queiroz como seleccionador de Colombia. Aquel partido en Quito acabó 6-1 y, para cuando James Rodríguez anotó de penalti el único gol de los cafeteros justo antes del descanso, la selección ecuatoriana ya contaba con un 4-0 a su favor.
La buena noticia para los de Reinaldo Rueda es que Ecuador, pese a ocupar el tercer puesto de la tabla con un punto más, no ha ganado ninguno de los ocho partidos que ha disputado este año fuera de su país, incluyendo los cinco de la Copa América celebrada en Brasil. En septiembre ya cayó por 1-0 en Montevideo y el pasado domingo sucumbió por 2-1 en Caracas, donde Enner Valencia llegó a abrir el marcador.
