El club muniqués se proclamará campeón de la Bundesliga si gana al Dortmund este sábado, clave también en la Serie A con el duelo entre el Inter y la Roma de Mourinho.
Tan solo es cuestión de tiempo que el Bayern de Múnich revalide el título de la Bundesliga para proclamarse campeón por décimo año consecutivo, con un margen de nueve puntos sobre la segunda posición del Borussia Dortmund a falta de cuatro jornadas para el final. El calendario se lo ha puesto a huevo a los de Julian Nagelsmann para lograr el objetivo con estilo: ganando Der Klassiker este sábado en su casa.
El Bayern regresa a su estadio 11 días después de caer allí eliminado de la Champions League contra todo pronóstico. Los muniqueses no perdieron el paso tras aquella gran decepción y el pasado domingo ganaron por 0-3 en el campo del Arminia Bielefeld, pero si hay un triunfo que puede quitarles el mal sabor de boca es el que pueden lograr este sábado frente a su gran rival a nivel nacional para certificar el título liguero.
Incluso el empate supondría la conquista virtual de la Bundesliga para el Bayern, ya que mantendría los nueve puntos de ventaja con nueve puntos en juego, teniendo en cuenta que supera en 27 goles el golaveraje total de su rival. De hecho, el Dortmund sabe que ni siquiera una victoria suya es suficiente para poner en peligro las opciones del Bayern, pero al menos también le serviría a los de Marco Rose para desquitarse frente al gran dominador del fútbol germano.
Al fin y al cabo, el Dortmund ha perdido cada una de las siete últimas ediciones del Klassiker, incluyendo el doloroso 2-3 del pasado diciembre a pesar de que Julian Brandt puso a su equipo por delante en el marcador a los cinco minutos de partido. Para encontrar la última vez que el Dortmund ganó un partido de liga en el Allianz Arena hay que remontarse a 2014 y el reciente 6-1 firmado contra el Wolfsburgo puede dar alas a Erling Haaland (autor de dos goles y una asistencia) y compañía.
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Mientras la Bundesliga está prácticamente decidida, la Serie A continúa al rojo vivo con el pulso entre el AC Milan y el Inter de Milán, separados por dos puntos pero los nerazzurri con un partido menos, sin descartar a un acechante Nápoles situado otros dos puntos por detrás del Inter. Precisamente el equipo de Simone Inzaghi afrontará el duelo más destacado de este sábado, ya que le toca recibir a la Roma de José Mourinho.
Es la tercera vez que el entrenador portugués se enfrenta esta temporada a su anterior club, con el que alcanzó la gloria hace ya más de una década, y la Roma ha salido derrotada de esos dos precedentes. Primero tuvo lugar el humillante 0-3 del pasado diciembre en el Olímpico y hace dos meses el conjunto capitalino quedó eliminado de la Copa de Italia con el 2-0 que supuso la primera visita de Mourinho a su antiguo club.
Situada en la quinta plaza, pero a cinco puntos del cuarto puesto de la Juve, la Roma está obligada a sacar un buen resultado si quiere seguir con opciones de entrar en la próxima edición de la Champions League. De momento, viene de empatar en el campo del Nápoles y son ya 12 jornadas seguidas las que lleva sin conocer la derrota.
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